Para llevar a cabo los objetivos se tendrán en cuenta unos principios:
Principio de actividad donde vuestros hijos no serán sujetos pasivos de la educación sino auténticos y únicos protagonistas. Se los proporcionarán diversas y variadas experiencias donde puedan: experimentar, manipular, explorar e investigar.
Principio de equilibrio emocional. Todos necesitamos sentirnos queridos y seguros, los niños en esto son mucho más vulnerables; necesitan sentirse bien, seguros de cariño y apreciados por los mayores. Esta calidad afectiva no solo se mide por la atención que reciben, sino que incluye el cariño y afecto que se manifiesta cuando se juega con él, cómo se le habla, cómo se le acaricia, cómo se le responde y cómo se le acoge. Todo esto va a favorecer su relación afectiva del hoy y del mañana.
Principio del juego. El juego es la actividad propia del niño, es su trabajo por excelencia, en él pone su atención. Es a través del juego como investiga, manipula, explora y establece relaciones significativas.